No hagas esto al preparar tu té: Errores que arruinan su sabor y beneficios

Si eres amante del té, seguro que buscas la mejor experiencia en cada taza. Sin embargo, hay errores muy comunes que pueden arruinar su sabor, disminuir sus propiedades o incluso hacer que no disfrutes al máximo de tu infusión. A continuación, te contamos los errores más comunes al preparar té y cómo evitarlos.

1. Usar agua demasiado caliente o demasiado fría

Uno de los errores más frecuentes es hervir el agua en exceso o no calentarla lo suficiente. La temperatura correcta depende del tipo de té:

  • Té verde: 70-80°C

  • Té blanco: 75-85°C

  • Té negro: 90-95°C

  • Té rojo (Pu-erh): 90-100°C

  • Tisanas e infusiones: 95-100°C

Si el agua está demasiado caliente, quema las hojas y amarga el sabor. Si está fría, el té no se infunde correctamente y pierde intensidad.

2. Dejar el té en remojo demasiado tiempo

Infundir el té por demasiado tiempo puede hacer que el sabor se vuelva amargo y astringente. Cada té tiene un tiempo recomendado de infusionado:

  • Té verde: 1-3 minutos

  • Té blanco: 3-5 minutos

  • Té negro: 3-5 minutos

  • Té rojo (Pu-erh): 4-5 minutos

  • Rooibos e infusiones: 5-7 minutos

3. Usar té en bolsitas comerciales

Las bolsitas de té del supermercado suelen contener polvo de té en lugar de hojas enteras, lo que reduce drásticamente su sabor y beneficios. Además, muchas de estas bolsitas liberan microplásticos en el agua caliente.

Alternativa: Té a granel 🌿

El té a granel conserva hojas enteras, lo que permite un mejor sabor y más antioxidantes en cada taza. Si quieres una experiencia real, opta por té de calidad y usa un infusor o tetera.

4. No medir la cantidad correcta de té

Usar demasiado té puede hacer que la infusión sea muy intensa y amarga. Usar muy poco resultará en una bebida insípida. Lo ideal es seguir estas medidas:

  • 1-2 gramos (1 cucharadita) por 200 ml de agua

  • Para tés más densos (como el Pu-erh), puedes usar un poco más.

5. Usar agua del grifo sin filtrar 🚱

El agua de baja calidad altera el sabor del té. Si el agua del grifo en tu zona tiene demasiado cloro o cal, el té perderá su esencia. Usa agua filtrada o embotellada para un mejor resultado.

6. No almacenar bien tu té

El té es muy sensible a la luz, humedad y olores. Guardarlo mal puede hacer que pierda su frescura y propiedades rápidamente. Almacena tu té en envases herméticos, alejados de la luz y la humedad.

7. Endulzarlo con demasiada azúcar o edulcorantes

El té ya tiene su propio sabor natural. Si lo endulzas en exceso, podrías perder las notas delicadas de sus hojas. En su lugar, prueba opciones más naturales como miel pura o un toque de stevia.


Conclusión: Pequeños cambios para un gran sabor 🍵

Evitar estos errores hará que tu té sepa mucho mejor y conservará todas sus propiedades. Si aún tomas té en bolsitas, prueba el té a granel y descubre una experiencia completamente diferente.

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